Un paraíso en tierras mexicanas que debes conocer

En estas vacaciones de verano, una temporada del año que seguro aprovecharás para salir y relajarte, bajar tus niveles de estrés o simplemente tomar un descanso del ruido y contaminación de la Ciudad; sin embargo, puede que ya conozcas o estés cansado de los mismos destinos turísticos en México (Acapulco, Cuernavaca, Cancún, Playa del Carmen, etc.), y necesitas literalmente alejarte de la civilización; hoy te tenemos una gran recomendación. Un maravilloso destino ubicado en la Península de Yucatán; una playa semi-virgen con un clima envidiable y un color turquesa en sus aguas que te cautivarán, precios razonables y poca gente: Celestún.

Autor: Iván Cruz Trujillo

Ubicado a 95 km de la Ciudad capital del Estado de Yucatán, Mérida; este destino ha tomado fuerza, por lo que ha ido evolucionando de un pueblo de pescadores a un importante centro turístico en el Estado. 

Para llegar a tan paradisiaco lugar, obviamente no es fácil, pero tampoco imposible. Saliendo de ciudades como Monterrey, Guadalajara o Ciudad de México existen vuelos con precios que varían entre Aeroméxico, hasta Volaris y VivaAerobus hacia la Ciudad de Mérida; nuestra recomendación es buscar un balance entre calidad y precio, y compras con anticipación; recuerda que lo barato a veces sale caro. 

En cuanto a equipaje no olvides traje de baño, ropa clara, bloqueador y preparación mental, recuerda que la zona que visitas llega hasta los 45 grados centígrados, con una humedad de más del 70%, prácticamente respirarás vapor de agua. 

Llegando al Aeropuerto Internacional de Mérida y con base en tu presupuesto puedes optar por la renta de un automóvil o un taxi que te lleve a la estación de autobuses en el centro de la ciudad, indicando que tu destino es la playa de Celestún.

Si tu elección fue el automóvil, enciende tu GPS y prepárate para aventurarte y pasar por rutas poco transitadas, carreteras con maleza e impresionantes paisajes, pueblos yucatecos muy pintorescos en tu destino a Celestún. Si tu decisión fue un tranquilo autobús, hay desde algunos autobuses con mil escalas, hasta de lujo directos que seguro disfrutarás.

Autor: Iván Cruz Trujillo

Al llegar quedarás impresionado con el turquesa de sus playas, lo blanco de su arena y lo rústico de sus paisajes. Mi recomendación: Aplica bloqueador, toma el Sol, acuéstate en la playa, renta un par de sombrillas y sillas para estar de lo más cómodo y disfruta de su calidez y cristalinas aguas.

Cuando el hambre llega, recomiendo dos pequeños restaurantes que no sólo está a precios razonables, sino a grandes porciones donde venden todo tipo de manjares del mar: “La Cabaña de Leo o Los Gorditos” ubicados en la playa entre las calles 23 y 25.

Para seguir con el día de aventura acércate a un improvisado puerto y preguntan por los tours en el pantano y la visita a los rosas e impresionantes parvadas de flamencos que te dejarán maravillado y con muchas ganas de regresar.

Al caer la noche y si decides no terminar la aventura hospédate en algún hotel de la costa, pide te enciendan una fogata y disfruta ya sea solo, con la pareja o en compañía de la familia del paraíso que te muestra esta playa mexicana alejada de todo y todos, aunque literalmente en los límites entre los estados de Campeche y Yucatán.

Entrada escrita por: Miguel Iván Cruz Trujillo

Licenciado en Administración Educativa por la Universidad Pedagógica Nacional Ajusco. Colaborador investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) en temas de educación y gobierno. Promotor del turismo nacional e interesado en la investigación y dinámica de la sociedad mexicana.

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